PID2023-153097NA-I00 - Ecología lunar de un depredador visual:

Las especies nocturnas representan un 30% de todos los vertebrados y un 60% de todos los invertebrados conocidos. Estudios recientes muestran que cada vez más especies por todo el mundo están alterando sus ritmos diarios de actividad y adentrándose en la noche como respuesta a las crecientes molestias diurnas que causamos a la fauna y al aumento de las temperaturas. Este cambio de ritmo, sin embargo, implica importantes desafíos, ya que los organismos diurnos podrían encontrar dificultades para encontrar comida, escapar de los depredadores o comunicarse en la oscuridad debido a limitaciones sensoriales. Cabría esperar que estos desafíos afecten a la reproducción y supervivencia y causen así selección sobre rasgos que permitan a estos organismos explotar recursos nocturnos. No obstante, nuestra capacidad para formular predicciones concretas sobre esta posibles adaptaciones es muy limitada debido a que buena parte de lo que sabemos sobre procesos ecológicos y evolutivos procede de estudios de especies diurnas.
La investigación que proponemos pretende esclarecer el rango y la naturaleza de las adaptaciones que permiten a los depredadores visuales nocturnos sobrevivir y reproducirse durante la noche. La mayor parte de las especies que, pese a necesitar luz para orientarse, extienden su actividad a la noche se ven obligadas a buscar alimento en períodos de semioscuridad, especialmente durante los días de luna llena. En este proyecto, emplearemos como especie modelo a un depredador lunarfílico el chotacabras cuellirrojo (Caprimulgus ruficollis) para investigar sus adaptaciones a los constantes altibajos que los ciclos lunares causan sobre sus oportunidades de alimentación. La mayoría de trabajos anteriores en esta línea se han centrado en la duración e intensidad de actividad de forrajeo y canto. Sin embargo, para lograr una comprensión más profunda de las adaptaciones a los ciclos lunares, es necesario adoptar un enfoque integrado que abarque un conjunto mucho más amplio de rasgos. Este proyecto tiene como objetivo abordar esta delicada misión aprovechando la experiencia acumulada gracias al desarrollo de un estudio longitudinal a largo plazo (2009-presente) sobre chotacabras, con sede en Doñana, S España. Usando enfoques observacionales y experimentales en condiciones de campo, investigaremos el efecto de la fase lunar sobre un conjunto de rasgos comportamentales, fisiológicos y de historia de vida. Estos rasgos incluyen características espaciales del movimiento, selección de presas, capacidad de
almacenamiento y procesamiento de alimentos, masa corporal, tasas de crecimiento de pollos, edad de independencia y grado de sincronía de la reproducción con el ciclo lunar (para ser usado como rasgo focal en análisis de la importancia de la luna como agente de
selección sobre las fechas de reproducción). Se combinarán datos transversales y longitudinales para cuantificar respuestas tanto a nivel poblacional como individual. En conjunto, estos datos nos permitirán testar hipótesis sobre la influencia de la luna sobre decisiones de movimiento y uso de recursos, capacidad digestiva, fecha de reproducción y, en última instancia, determinar su valor adaptativo. Esperamos que los resultados de este proyecto tengan un impacto considerable, dada la urgencia de aumentar nuestro conocimiento sobre las especies nocturnas y, más concretamente, de identificar los rasgos que podrían mediar las futuras respuestas de los animales a presiones antrópicas.